
Precisamente ése es mi propósito para este año: intentar cambiar ese proceso mental que me hace retrasar esas tareas, aumentando de paso la productividad y además disminuyendo mis niveles de estrés, angustia y agobio, con lo que mi calidad de vida mejoraría sensiblemente.
En Semana Vista leí un post aclarador sobre el tema. Ahora toca aplicarse el cuento.
Comments (0)
Publicar un comentario